miércoles, 26 de diciembre de 2012

Oportunidades descalzas



En una ocasión, dos vendedores de zapatos fueron enviados a una isla desconocida y lejana con la difícil tarea de vender zapatos allí. Uno de los vendedores de zapatos se llamaba Ramón, el otro se llamaba René. Veamos los reportes que ambos zapateros dieron a su jefe al llegar a la isla:

- El reporte de Ramón: Jefe, han sido dos días agotadores de viaje, la comida estuvo malísima y me enfermé del estomago en el barco, pero bueno, al fin llegué a la isla. Desgraciadamente, le tengo pésimas noticias. La gente aquí es tan atrasada que ni siquiera usan zapatos, ellos simplemente andan descalzos. Me devuelvo mañana mismo para allá. Lo siento!…

- El reporte de René: Hola jefe, el sol por aquí es radiante y la brisa marina increíblemente refrescante. He tenido dos días completos para organizar mi trabajo en la isla, y hasta le pude ayudar al chef del barco a preparar unos platillos. Le tengo magníficas noticias, aquí todos necesitan zapatos, repito, nadie tiene zapatos…vamos a hacer una venta loca. Por favor, envíeme lo antes posible todos los zapatos que tenga en bodega, se que los voy a vender todos. No me espere pronto…!

Pareciera que ambos vendedores fueron a lugares distintos, pareciera que viajaron en diferentes barcos, pero lo cierto del caso es que ambos fueron a la misma isla en el mismo barco en el mismo momento. Entonces, ¿qué marcó la diferencia? Sin duda alguna, fue la actitud de cada uno de ellos tuvo frente a las circunstancias que se les presentaron.

¿Qué hay de ti?; ¿vas a dejar que los pies descalzos te desanimen?

Te aconsejo que mires las oportunidades, en lugar de ver los problemas.

1 comentario:

  1. cuando nos concentramos en las oportunidades que nos da DIOS,es cuando vamos a prosperar en todas las áreas de nuestras vidas,bendiciones P:A

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